Cuando nace su bebé, tiene muchas preocupaciones en mente y, si bien el enfoque principal es cuidar a su recién nacido, la mayoría de las mamás también quieren perder el peso del bebé. La buena noticia es que si tenía un peso saludable antes del embarazo y ganó el peso recomendado (de 25 a 35 libras) durante el embarazo, debería poder bajar de peso en unos pocos meses mediante la dieta y el ejercicio. Sin embargo, si tenía sobrepeso antes del embarazo, puede tardar hasta un año.
A pesar de la necesidad de perder peso, lo más importante que debe recordar es hacerlo lentamente y mantenerse saludable mientras pierde peso. A continuación se presentan consejos para perder peso de manera saludable después del parto.
Cómo perder peso de manera saludable después de dar a luz
Directriz general
La mejor manera de acelerar el proceso de recuperación después de dar a luz y después de la pérdida de peso después del embarazo es comer de manera saludable y asegurarse de consumir muchas frutas y verduras. Esto también aumentará su energía para que pueda mantenerse al día con su bebé. Comer una dieta saludable es crucial tanto si está amamantando como si no, y debe intentar seguir estos consejos:
- Siempre desayunar
- Tenga cinco porciones o más de frutas y verduras cada día.
- Coma alimentos ricos en fibra como semillas, granos, lentejas, frijoles y avena
- Coma alimentos ricos en almidón con cada comida, incluyendo pasta, arroz y pan
- Limite el consumo de alimentos azucarados y grasos como los refrescos, los pasteles y la comida rápida
- Vigile el tamaño de las porciones tanto en las comidas como durante los refrigerios.
Cuando combina su alimentación saludable con ejercicio, esto le ayudará a perder grasa (no tejido magro) y mejorar su estado físico general.
1. No hagas dieta demasiado pronto
El parto y el parto pueden ser muy duros para su cuerpo, por lo que debe esperar al menos seis semanas hasta que comience a tomar medidas activas para perder peso. Los expertos sugieren esperar dos meses completos si está amamantando.
Si comienza a hacer dieta demasiado pronto después de dar a luz, es posible que el proceso de recuperación sea más lento y hasta que se sienta más cansado. La dieta también puede afectar su suministro de leche materna, por lo que siempre debe esperar si está amamantando.
2. Coma súper alimentos
Debe apuntar a seleccionar alimentos ricos en nutrientes y bajos en grasa y calorías. El pescado es una excelente opción con DHA (uno de los ácidos grasos omega-3 esenciales que ayudan con el desarrollo del recién nacido). Trate de concentrarse en los peces de agua fría como el atún enlatado, las sardinas y el salmón.
El yogur y la leche son otra gran opción debido a su contenido de calcio. También debe tratar de obtener proteínas y fibra de frijoles, pollo y carne magra.
3. Amamantar
Los expertos continúan en desacuerdo sobre si es más fácil perder peso mientras se amamanta debido a estudios contradictorios, pero todos están de acuerdo en que no afectarán su pérdida de peso y son excelentes para su bebé. Puede mejorar su inmunidad e incluso le permitirá comer alrededor de 300 calorías más cada día si solo amamanta.
4. Beber mucha agua
El agua no solo evita que usted se deshidrate, sino que también lo puede llenar para que no tenga tanta hambre e incluso aumente su metabolismo. La mejor manera de juzgar su ingesta ideal de agua es controlar su orina; debe estar claro y usted quiere ir al baño cada tres o cuatro horas.
5. Entrenamiento
Aunque la dieta es crucial para la pérdida de peso posterior al embarazo, es solo un factor. Asegúrate de incluir entrenamiento de fuerza y ejercicios aeróbicos para que puedas quemar grasa y mantener huesos y músculos fuertes. El ejercicio puede incluso ayudar a aliviar el estrés. El ideal es de unos 150 minutos cada semana, pero esto puede implicar algo tan simple como salir a caminar con su bebé en su cochecito. No olvides el entrenamiento de fuerza e incluso puedes usar latas de sopa como pesas. Siempre hable con su médico antes de hacer ejercicio después de dar a luz.
6. Trate de dormir lo suficiente
Aunque es difícil para las nuevas mamás dormir ocho horas por noche, es importante esforzarse al máximo. Si tiene falta de sueño, probablemente le resulte mucho más difícil perder peso porque su cuerpo liberará cortisol y otras hormonas del estrés que promueven el aumento de peso. La mejor manera de dormir lo suficiente es dormir la siesta y tratar de irse a dormir temprano cuando sea posible.
7. Establecer metas realistas de pérdida de peso
La mayoría de las mujeres perderán más de 10 libras durante el parto debido al peso del bebé, el líquido amniótico y la placenta. Durante la próxima semana, perderá líquidos retenidos y perderá peso adicional. A pesar de esto, la grasa que usted almacenó durante el embarazo no es tan fácil de perder.
Un objetivo razonable con dieta y ejercicio es perder una libra por semana y debe recordar que puede llevar seis meses o más perder todo el peso de su bebé. También es posible que su peso no se distribuya de la misma manera, por lo que debe ser realista. Recuerda aceptar cualquier cambio en tu cuerpo ya que son naturales.
8. formar equipo
Necesitará apoyo para perder el peso de su bebé, así que trate de involucrar a su pareja. Trate de comprometerse a comer sano y deshacerse de los artículos no saludables en su hogar. Considere salir a pasear por la noche en lugar de sentarse en casa y mirar televisión. Si usted y su pareja se cuidan, debería encontrar mucho más fácil perder peso.