Un niño pequeño que parece un poco deprimido y reacio a comer, incluso aquellos alimentos que normalmente le encantan, no es una buena señal. Es una indicación de que está a punto de vomitar. El vómito de este niño no se detendrá rápidamente y continuará vomitando hasta por tres horas con 10 minutos de descanso. El niño entonces se agotará con todos los vómitos y finalmente se acostará respirando pesadamente. Los siguientes son algunos consejos que pueden ayudarlo a salir de esta situación preocupante.
¿Qué causa el vómito en niños pequeños?
El vómito es un problema aterrador pero común que enfrentan los niños pequeños. Puede haber muchas razones por las cuales un niño pequeño puede vomitar, pero la mayoría de las veces no es nada de qué preocuparse. Sin embargo, descubrir la causa de los vómitos sigue siendo de vital importancia para que el niño reciba la atención adecuada. Si el niño solo vomita por una sola vez, entonces hay muchas posibilidades de que el vómito haya sido solo por comer demasiado; sin embargo, si no se detiene, entonces una de las siguientes razones podría estar causándolo.
El vómito puede deberse a una infección viral o bacteriana. En los niños pequeños, la gripe estomacal es la razón más común de los vómitos. Sin embargo, en los casos en que la infección haya afectado el revestimiento del estómago del niño, también podría tener diarrea y fiebre. El vómito en tales casos puede tardar aproximadamente 24 horas en calmarse. Las infecciones respiratorias, del oído y del tracto urinario a veces también pueden causar vómitos en los niños pequeños. En casos raros, los vómitos también pueden ser un signo temprano de neumonía y apendicitis. El llanto excesivo, comer una sustancia tóxica o venenosa y el mareo por movimiento son algunas de las otras razones notables que pueden causar vómitos en los niños pequeños.
¿Qué puedo hacer para aliviar el vómito en niños pequeños?
La gravedad de los vómitos en los niños pequeños generalmente determina lo que se debe hacer para aliviar el dolor y las molestias del niño. Si el vómito ocurre más de 8 veces durante la duración de un día, se considerará grave y debe comenzar a preocuparse por la deshidratación de su bebé.
1. Mantenga a su niño pequeño de la deshidratación
En caso de vómitos leves (1-2 veces por día), las posibilidades de deshidratación son escasas. Sin embargo, en los casos de vómitos moderados (3-7 veces por día) y graves (más de 8 veces por día), las posibilidades de deshidratación se vuelven más pronunciadas. Para salvar a su hijo de la deshidratación, debe darle 1 floz (30 ml) de SRO, caldo o gelatina de postre cada 20 minutos durante al menos una hora. Comience con pequeños sorbos y si el niño no vuelve a vomitar, aumente la dosis del líquido transparente en 1 floz por cada hora que no vomite. Evite darle jugos, gaseosas o agua a su hijo con fines de rehidratación, ya que no contienen los minerales y las calorías que el niño necesita en esta etapa.
2. Ofrezca alimentos fáciles de digerir
Si su bebé va 8 horas después de vomitar, debe comenzar a ingerir alimentos blandos como cereales, ya que puede hacer que su hijo vuelva a su dieta habitual. Si su niño está tomando leche de fórmula, debe darle un par de onzas menos por alimentación inicialmente antes de reanudar la dieta normal después de 24 horas desde el último vómito. Para bebés un poco mayores, puede darles alimentos como puré de papas, pan, galletas, sopa suave y cereales. En caso de que ya no tenga más vómitos después de darle a su hijo alimentos blandos durante aproximadamente un día, puede volver a poner a su hijo en su dieta diaria normal y rutinaria.
3. Déjalos descansar lo suficiente
Es importante que su hijo descanse mucho después de vomitar. No debe permitir que su niño vaya a la escuela (si va a una) Durante dos días después de su último vómito. Descansar para su niño puede ayudar a calmar su estómago ya que el estómago tiende a estar vacío mientras el niño duerme en los intestinos. Las posibilidades de que la comida regrese por la boca a medida que los vómitos disminuyen enormemente una vez que salen del estómago.
4. Evita estos errores
El vómito no puede causar deshidratación si el vómito no se produce debido a la diarrea. Sin embargo, muchas personas administran la cantidad total de líquido que desean después de vomitar de una sola vez, lo cual es una de las razones principales de los vómitos continuos en los niños pequeños en lugar de aumentar lentamente la cantidad de líquido que el niño toma. Sin un medicamento aparente disponible para los vómitos, el único tratamiento posible es alterar la dieta.
Cuándo buscar ayuda médica
1. ¿Cuándo necesito llamar a mi médico?
No debe dudar en ponerse en contacto con el médico de su hijo si está preocupado por la salud general de su bebé o si tiene inquietudes específicas sobre la condición actual de su hijo. También debe llamar a su médico en caso de que el niño vomite con fuerza después de haberlo alimentado o en caso de que el bebé siga vomitando los líquidos que le administra. También es mejor contactar al cuidador si su hijo contrae fiebre alta que no desaparece.
2. ¿Cuándo debo llamar para atención inmediata?
Debe buscar ayuda al instante o incluso llamar al 911 en caso de que su bebé empiece a jadear por aire y sufra dificultad para respirar o si su hijo se duerme y no se despierta, incluso después de varios intentos. Su hijo necesitaría ayuda inmediata si su vómito tiene sangre o tiene algo parecido a los granos de café, o si se queja de que el dolor abdominal persiste incluso después de vomitar. También debe buscar atención inmediata si su hijo se vuelve extremadamente irritable y se queja de dolor de cabeza severo y rigidez en el cuello, o si tiene problemas para orinar y llora cuando lo hace.