Crianza de los hijos

Cómo explicar el racismo a tu hijo

Puede que no sea fácil explicar el racismo a los niños porque estamos preocupados por usar las palabras equivocadas y, a veces, tememos que eso los anime a ser racistas. Sin embargo, los niños notan la diferencia racial antes de que lo mencionemos, y hablar sobre ello puede ayudarlos a sentirse más cómodos y aclarar la confusión. Los padres deben aprovechar la oportunidad para discutir el tema para ayudar a sus hijos a entender la diferencia. Estos son algunos consejos sobre el racismo para los niños y lo ayudarán a hablar de ello con sus hijos.

Cómo explicar el racismo a tu hijo

1. Disputa el comentario prejuiciado

Los niños a veces dicen cosas que pueden sorprenderte, pero a menudo solo repiten lo que han escuchado de los demás. Si dicen algo que insinúa una descripción estereotipada de los demás o muestran actitudes prejuiciosas, pregúnteles qué les hace decir eso, sin reaccionar de manera demasiado negativa. Disputa estas actitudes con suavidad y da ejemplos de tu propia experiencia.

2. Enseñar con historias

Enseñe a sus hijos a usar historias sobre grandes personas que lucharon contra el racismo, como Martin Luther King. Cuénteles sobre la historia de las experiencias que tuvieron los diferentes grupos de personas y cómo han evolucionado las actitudes hasta donde estamos hoy.

También puede usar ejemplos en la vida diaria para ayudarlos a ver la imagen con mayor claridad. Por ejemplo, puede mostrarles manzanas de diferentes colores y luego hacerles darse cuenta de que todas saben bien, incluso si son diferentes.

3. Adapte el mensaje a la edad de su hijo

Dependiendo de la edad de su hijo, la forma en que discuta la diversidad racial puede variar. Los niños menores de siete años pueden asimilar todo lo que decimos antes que cualquier otra cosa, incluso lo que ellos mismos experimentan. Pero después de los diez años, sus propias experiencias importan más de lo que decimos. Por lo tanto, la forma en que les hablamos debería evolucionar a medida que crecen. Si bien somos jóvenes, podemos explicarles sobre la diversidad y la igualdad, pero a medida que crecen, también podemos animarlos a interactuar con personas de diversos orígenes étnicos, raciales o culturales.

4. Anime a su hijo a ponerse en contacto con personas de diferentes grupos

Participar en actividades con diferentes grupos de personas puede ayudarlos a formar vínculos significativos con otros niños y adultos. Anímelos a unirse a un equipo deportivo o un proyecto comunitario donde los participantes compartan un objetivo común. Si vive en una comunidad que no tiene antecedentes diversos, aún puede intentar exponer a los niños a diferentes culturas a través de libros o películas. Discuta cómo las personas pueden ser diferentes en términos de idioma, tradiciones y alimentos, pero similares en otros rasgos, como ser bueno en la escuela o en los deportes. Ayudarlos a encontrar diferencias y similitudes puede ayudarlos a sentirse conectados con personas de diferentes razas.

5. Establecer empatía.

Durante su desarrollo social, los niños necesitan desarrollar la habilidad de cultivar la empatía, que está más allá de la idea del prejuicio. Deben entender que otras personas pueden tener deseos, intenciones y creencias que son diferentes de los suyos. Debe ayudar a sus hijos a considerar cómo piensan y sienten los demás, especialmente si están excluidos o si necesitan ayuda.

6. Conviértete en un modelo a seguir

Los niños a menudo imitan e interpretan el significado de los comportamientos que ven de usted, por lo que es importante que se convierta en un modelo de conducta positiva hacia diferentes personas de diversos orígenes. Interactúe con personas de diferentes razas y culturas, sea más activo en eventos multiculturales en la comunidad y establezca amistades con diferentes personas.

Siempre esté atento al idioma que habla frente a sus hijos. No hagas comentarios estereotipados o chistes insensibles sobre los demás que están frente a ellos.

7. Averigüe si su hijo es una víctima del racismo

Es posible que su hijo no pueda expresar cómo ha experimentado el racismo en la escuela o en el vecindario. Es mejor descubrirlo haciendo esto de una manera más sutil, sin ponerlos a la defensiva. Puede comenzar la discusión hablando sobre algunas noticias y pidiéndoles que compartan sus ideas. Esto puede abrir las puertas para que discutan los problemas que pueden estar molestándolos. Hágales saber que el racismo no es su culpa y que la mala conducta proviene de otras personas que son responsables de acciones como las burlas.

Para aprender más sobre cómo enseñar a los niños sobre el racismo, vea el video a continuación: